La profesora Celia Sánchez Ramos junto a un equipo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid que pertenecen al departamento de Optometría y Visión de la Facultad de Óptica y Optometría han descubierto que ratones en exposición continuada a la luz de la pantallas de dispositivos electrónicos como las tablets, pueden aumentar hasta en un 23% la muerte celular de la retina.
Los daños que las pantallas de dispositivos móviles provocan en nuestros ojos podrían ser irreversibles. Esta situación puede resultar perjudicial para la población en general pero sobre todo en niños.
Ratones en jaulas rodeados de pantallas de móviles
En el estudio con ratones, se crearon grupos que estaban dentro de una jaula y que estaban rodeados de pantallas LED que emitían luz blanca.
Durante 3 meses estas pantallas estuvieron encendidas 16 horas diarias y el experimento arrojó datos que mostraban la muerte celular de capas internas y externas de la retina.
Esta muerte de células podría conllevar daños en la mácula, algo que provocaría daños en la visión frontal. Los resultados de estos estudios ya han llegado a manos de la Comisión Europea para su estudio y análisis por parte de expertos internacionales.
Se trata de analizar las posibles consecuencias para la salud visual de la personas que puede producir la luz de las pantallas LED en los ciudadanos de la Unión Europea.
Atención con los niños
Celia Sánchez Ramos insiste en que los niños están recibiendo 3 veces más luz que un adulto al momento de usar dispositivos electrónicos.
¿A qué se debe esto?. Al tener los niños los brazos más cortos, la distancia entre el ojo y la pantalla se reduce.
Para minimizar estos daños se recomienda el uso de filtros especiales para las pantallas LED así como también el realizar descansos periódicos al uso de pantallas.
Otro consejo es el de bajar la intensidad lumínica de teléfonos, tablets y ordenadores cuando navegas por internet ya sea por trabajo para tu empresa, estudios o diversión.
Un saludo desde Optipunt, tu centro de salud visual en Figueres. 🙂
